Los empapadores son productos absorbentes diseñados para proteger superficies como colchones, sillas o cualquier otro mobiliario de derrames líquidos, en particular la orina. Se usan comúnmente en la atención sanitaria y en el cuidado de bebés, niños pequeños, personas mayores o individuos con ciertas discapacidades físicas o problemas de incontinencia. Los empapadores pueden ser desechables o reutilizables, dependiendo del material con el que estén fabricados.

Los empapadores desechables deben ser tirados en la basura común. No se recomienda arrojarlos en el inodoro ya que pueden causar obstrucciones en el sistema de saneamiento. Los empapadores reutilizables, por otro lado, pueden ser lavados y usados nuevamente. Es importante seguir las instrucciones de eliminación específicas del fabricante y las normativas locales de gestión de residuos.

Es relativamente común que los niños se orinen en la cama hasta los 5 años de edad. La enuresis nocturna, término médico para referirse a hacerse pis en la cama, puede ser considerada normal en niños pequeños. Si este comportamiento persiste después de los 5 años, puede ser una buena idea consultar a un pediatra o especialista en salud infantil, ya que cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Sin embargo, si la enuresis nocturna continúa después de los 7 años, podría ser útil una evaluación médica para descartar cualquier problema subyacente.

Para ayudar a un niño a no mojar la cama, se pueden seguir varias estrategias: establecer rutinas antes de dormir que incluyan ir al baño, limitar la ingesta de líquidos en las horas previas a la noche, utilizar alarmas de enuresis que despierten al niño cuando empiece a orinarse, asegurar un ambiente que promueva el levantarse a orinar por la noche si es necesario, y fomentar un diálogo abierto y sin castigos sobre el tema. En algunos casos, puede ser útil la consulta con un especialista que ofrezca otras terapias o tratamientos específicos.